Quiénes somos
REINTEGRA es un espacio donde las oportunidades reales cambian historias.
Desde hace 40 años acompañamos a niñas, niños y adolescentes antes o después de que crucen límites, para que encuentren otro camino posible.
Nuestro modelo funciona: el de quienes pasan por REINTEGRA no reinciden.
▪ Prevenir, comprender y acompañar sí sirve.
▪ Y cambia comunidades enteras.
Prevenimos que decisiones equivocadas se conviertan en condenas de por vida.
Acompañamos a niñas, niños y adolescentes para que tengan oportunidades reales de construir un futuro diferente, ya sea antes o después de haber cruzado límites.
Con un modelo profesional, humano y evaluado, trabajamos con ellos, sus familias y comunidades para romper ciclos de violencia y transformar el rumbo.
Investigamos, medimos y evolucionamos constantemente para asegurar que nuestro impacto sea real.
Quiénes son ellos
Son adolescentes que ya fueron juzgados y, en lugar de ir a prisión, llegaron a Reintegra.
El sistema les dio una segunda oportunidad: cumplir su medida en libertad, acompañados por nosotros.
Llegan por mandato judicial, sí… pero algo cambia. Con el tiempo, dejan de venir por obligación y empiezan a venir por decisión. Porque descubren que esto les ayuda.
Porque empiezan a creer que sí pueden. Porque ahora vienen por convicción.
Son chavos que cometieron un error, sí. Pero también son hijos, hermanos, estudiantes, personas con sueños que nunca aprendieron otra forma de resolver lo que les dolía.
No son delincuentes. Son historias que aún se están escribiendo.
Aquí encuentran —muchas veces por primera vez— un espacio donde los escuchan, los entienden y les enseñan herramientas para elegir diferente.
No buscan excusas.
Buscan una oportunidad real.
Quién eres tú
Eres parte de la sociedad que ve, que no voltea la mirada.
Que entiende que no todos partimos del mismo lugar, pero sí podemos caminar hacia el mismo destino.
Eres esa persona que, sin juzgar, pone el hombro.
Que reconoce que México se construye entre todos, y que solo con oportunidades, no con castigos, vamos a cambiar algo.
Tú escuchas lo que nadie quiere oír: Que hay adolescentes que cometieron errores y que, si no hacemos algo hoy, los volverán a cometer mañana.
Pero si les damos herramientas, pueden reintegrarse desde otro lugar.
Uno que sume. Uno que transforme.
Eres quien pone una pausa en su vida para darle sentido a la de alguien más.
Eres quien ve a los que nadie ve.
Eres quien decide sumar.
No necesitas capa ni poderes. Solo corazón, conciencia y decisión.
Y ya con eso, haces más de lo que imaginas.
Eres la persona que ve un error… y elige creer en la posibilidad de cambio.
